El sábado 25 de febrero a las 20,30 Fantomas Vuelve comenzaba su concierto en el Pósito con poca asistencia de gente. El grupo de guitarras, teclado y cajón flamenco repasaron canciones de las de siempre que nos ponían añorantes, los sonidos de guitarra muy clásicos, como ellos en escena todos de negro.
Me gustaron bastante las piezas instrumentales, sonidos de discos de grupos o solistas mil veces escuchados, canciones de ayer pero que hasta a los que no les corresponden por generación las han hecho suyas igualmente. Con algunas versiones cantadas, ya le puse peros a las voces, y es que, a veces, no identificaba hasta pasado un buen rato la pieza en cuestión de tan transformadas que eran las versiones con voz. Sigo insistiendo en que el Pósito necesita esos pequeños arreglos, cortina-telón, luces, calefacción camerinos y servicios, en fin, a ver si un día de estos empiezan los arreglos.
El domingo, en el Nerea-vermú eran ellos también pero me casó la cosa mucho mejor, puede que sea un grupo mejor así que en concierto.