Como cuerpo extraño consideramos a cualquier elemento externo (arena, pestañas, espinas, insectos, limaduras, papel, juguetes, frutos secos o legumbres, etc.) que penetra en nuestro organismo a través de cualquier estructura: la piel, la boca, la garganta,la nariz o los oídos, pudiendo generar molestias o daño más o menos grave.
Los accidentes por cuerpos extraños pueden ocurrir en multitud de actividades cotidianas y laborales, por lo que resulta muy interesante saber actuar para solucionar el problema, disminuir las molestias y sobre todo no agravar las lesiones.
Cuando se mete algo en el ojo
En el ojo frecuentemente sufrimos la entrada de cuerpos extraños durante las actividades cotidianas y laborales. Salpicaduras de productos químicos, pestañas, tierra, lentillas, insectos, o partículas de madera, arena y metal son los materiales más frecuentes que pueden introducirse bajo el párpado o impactar contra el globo ocular. Estos materiales en contacto con nuestro ojo pueden producir picor, dolor e irritación, y en algunas ocasiones úlceras u otro tipo de lesión en la córnea, esclerótica, párpados, cristalino, etc. En los trabajos de desbroce, mecánicos y construcción las medidas de protección como gafas y caretas profesionales son la medida más eficaz para evitar el riesgo de estos accidentes.
Lo que DEBEMOS HACER:
1. Siempre que sea posible, nos lavaremos las manos con agua y jabón.
2. Si la persona es portadora de lentillas, las retiraremos antes de intentar retirar el cuerpo extraño.
3. Coloque su mano izquierda debajo del mentón; con sus dedos índice y pulgar, entreabra el ojo afectado para observar el tipo y la localización del cuerpo extraño. Le pediremos que mueva el ojo arriba, abajo y hacia los lados.
4. Si vemos el cuerpo extraño intentaremos arrastrarlo con agua, ya sea directamente al chorro del grifo, con una jarrita o mediante una jeringuilla, inclinando la cabeza hacia el lado lesionado.
5. Si la lesión se ha producido por un producto caliente o corrosivo mantendremos los lavados de forma suave pero constante más de diez minutos, revisando el párpado inferior y superior.
6. Si las maniobras anteriores no dan resultado y el cuerpo extraño es móvil, le pediremos que parpadee, ya que a veces este acto es suficiente para que se mueva hacia el ángulo interno, lo que nos permitirá que podamos retirarlo con la punta de un pañuelo o de una tela limpia.
7. Si no conseguimos ver el cuerpo extraño, no podemos sacarlo o se trata de una esquirla metálica debemos acudir a un centro sanitario para ser valorado y proceder a su extracción. Se debe tapar el ojo con una gasa y esparadrapo, pues con cada parpadeo se incrementan las molestias.
8. Siempre que continúen las molestias, exista ya la posibilidad de que el cuerpo extraño sea metálico o que se haya incrustado en la córnea acudiremos a un centro sanitario o a nuestra Mutua de Accidentes de Trabajo, ya que se necesita un diagnóstico preciso y una extracción muy cuidadosa con medios profesionales lo antes posible. Los cuerpos extraños que penetran en la córnea o el globo ocular pueden poner en grave riesgo la integridad del ojo y por supuesto la visión, por ello siempre deben ser retirados lo antes posible.
9. Durante el verano pastores, ganaderos o excursionistas pueden verse afectados por larvas de moscas en el ojo. La mosca se posa o pasa cerca del ojo y descarga el contenido de su prole en donde estima que pueden sobrevivir. Las gentes del campo acuden refiriendo que ¡la mosca le hacagao en el ojo! Si vemos algo pequeño y que se mueve de forma endiablada, ahí están las decenas de pequeñísimas larvas que deberán ser retiradas de una en una. Hay que guardar la calma y acudir al Hospital más cercano para que puedan ser retiradas con toda seguridad.
Lo que NUNCA debemos hacer:
• Utilizar pinzas u objetos rígidos para intentar extraer el cuerpo extraño, ya que podemos lesionar el ojo. Lo dejaremos para los profesionales.
• Intentar retirar un cuerpo extraño que se encuentra impactado en el párpado o en la córnea.
• Poner colirios, pomadas u otros medicamentos. Solo agua o lágrimas artificiales si están a nuestra disposición.
• Permitir que se frote el ojo. Aunque desde que somos pequeños nos frotamos los ojos cuando nos entra algo en ellos, NO DEBEMOS HACERLO, ya que incrementaremos las lesiones al deslizar y presionar dicho cuerpo extraño contra el párpado o la córnea.
Precaución con los ojos, no hay repuesto
Próximo mes: cuerpos extraños en nariz y oídos.