Los lavabos díscolos
FALSA CREENCIA:
En el hemisferio norte, al salir el agua del lavabo, gira en el sentido contrario a las agujas del reloj; en el hemisferio sur, gira en el sentido contrario. Esto es consecuencia de la aceleración de Coriolis.
Ignorancia Científica. El efecto Coriolis se presenta cuando un cuerpo se mueve en la dirección radial de otro que está girando. Veámoslo.
Si te colocas, mirando hacia el centro, en el borde de un tiovivo que gire en el sentido contrario a las agujas del reloj, tendrás una gran velocidad lineal hacia tu derecha.
Cuando pases ante mí, que estaré quieto en el suelo, lanza una pelota apuntando al eje del tiovivo. La pelota tendrá la misma velocidad lineal hacia la derecha que tenías tú cuando salió de tu mano y, por tanto, se desviará a la derecha (el sentido del giro) del blanco.
Para ti la pelota sufre una aceleración lateral que la desvía hacia la derecha respecto de la trayectoria inicial.
Para mí la pelota se mueve linealmente según la suma de dos velocidades, la dirigida al centro que le imprimes con la mano y la velocidad hacia la derecha que llevabas tú en el momento del tiro.
Conforme la pelota se acerca al eje del tiovivo la diferencia entre su velocidad lineal hacia la derecha y la del punto del disco que sobrevuela es mayor. Esto significa que para poder apreciar el efecto Coriolis hacen falta grandes recorridos sobre el radio del disco; si no, el efecto será insignificante.
La Tierra gira de Oeste a Este, el sentido contrario a las agujas del reloj (para los habitantes del hemisferio norte). Si dejas caer una pelota desde una altura hacia el centro de la Tierra, se desviará hacia el Este (el sentido del giro).
En el hemisferio sur, el movimiento de Oeste a Este es para ti un movimiento en el sentido de las agujas del reloj, y si allí dejas caer una pelota la verás desviarse hacia el Este.
Pero “vayamos al lavabo”. Cuando el agua baja por el lavabo, el efecto Coriolis es insignificante, ya que la diferencia de la velocidad lineal hacia el Este de la parte alta del agua respecto de la de la parte baja es prácticamente nula: la altura recorrida es de solo 10 cm.
En resumen, el agua en los lavabos gira igual en los dos hemisferios y su movimiento tiene que ver con la corriente de la tubería, la forma del lavabo, etc. el efecto Coriolis no tiene nada que ver.
